El sinhogarismo ha sido un problema histórico en Puerto Rico. En todos los municipios del país es normal ver a personas deambulando por las calles, sin acceso a una vivienda fija.
Algunos viven en la calle, otros en albergues, y otros muchos, los menos visibles, en casas de familiares o de amigos, o incluso dentro de sus carros. Estamos, por lo tanto, ante un fenómeno que tiene muchas caras: no todos son adictos, ni provienen de experiencias traumáticas, lo que hace muy difícil de identificar.
Para que estas personas puedan poner fin a su situación de exclusión habitacional y recuperen la dignidad que otorga dormir bajo un techo, la organización sin fines de lucro Coordinadora Moriviví, a través del proyecto Landlord Engagement, ayuda a que las personas sinhogar puedan tener uno.
Para tal fin trabajan en la creación de un inventario de viviendas en alquiler que puedan ser usadas por estos ciudadanos, a quienes a través del gobierno federal se les entregan unos vales administrados por el Departamento de la Familia para subsidiar la renta por hasta un año, en algunos casos más.
Sin embargo, a pesar de haber fondos destinados a estos proyectos, desde Moriviví denuncian que la crisis de vivienda de alquiler en el país pone en riesgo sacar de la calle a quienes buscan la oportunidad.
La doctora Teresa Carrero es la directora del proyecto Landlord Engagement. En conversación con Visión la psicóloga informó que en Moriviví atienden 5 municipios urbanos y 49 rurales, lo que significa que cubren el 56% de la población total del país, y al 47% de personas sin hogar.
Este último dato se desprende del último conteo de personas sin hogar del que se tienen datos, el cual corresponde al año 2019. Aunque recientemente, en marzo de 2022 se realizó un nuevo “censo” de personas en situación de sinhogarismo, los números aún no han sido compartidos.
Según Carrero, los estimados a priori advierten de una subida del 15% en personas viviendo en la calle.
Estos datos, señaló la doctora, son imperfectos, pues “ cuentan al que está en la calle, en un banco, debajo de un puente, en un campamento, pero no cuenta al que vive con amistades, o con un amigo, o a las personas que duermen en un carro o edificios abandonados. No hay certeza de cuántas personas están sin hogar”.
Lo que sí saben en Moriviví es el total de personas que ellos atienden. Para el 2021 la organización atendió a más de 3,300 sinhogar, la mayor parte jóvenes de 25 a 55 años.
‘Vouchers’ para alojar a los sinhogar, pero falta de casas
WWWBajo el programa de ‘vouchers’ las personas sin vivienda estable reciben un vale que equivale a dinero para alquilar una vivienda. Cada una de las organizaciones o municipios que dan servicio a esta población se encarga de evaluar al candidato o candidata y entregarle la ayuda, que oscila entre los 400 y 700 dólares.
El problema viene a la hora de buscar casas disponibles: Puerto Rico sufre una crisis de viviendas disponibles para alquiler a largo plazo, y en muchos casos los caseros se enfrentan a los prejuicios de alojar en sus propiedades a personas a las que de forma errónea vinculan con la droga o la delincuencia.
Por eso, el trabajo de Landlord es de vital importancia. Ellos se encargan de buscar viviendas disponibles, evaluar e inspeccionar las condiciones de las mismas, y poner en contacto al usuario con el dueño de la propiedad.
“Nuestro inventario está destinado a las organizaciones que brindan servicio a los sinhogar. Es como un Airbnb donde entran y filtran por pueblo, tipo de propiedad, etc”, expresó Carrero.
“Al buscar viviendas tenemos problemas con la renta. Los vales se otorgan en base a unas tablas federales, que estipulan lo que vale una casa según el tipo de población, el número de habitaciones, etc. Pero muchas veces los compañeros encuentran que la renta federal es muy baja y que los dueños quieren poner una renta más alta”.
Para tratar de convencer a los propietarios el programa tiene incentivos, como por ejemplo el pago de dos meses adicionales a los 12 que cubre el programa.
Además, para evitar estigmas y prejuicios, en Landlord Engagement tienen un componente de educación y capacitación. “Orientamos y capacitamos a los propietarios sobre qué es una persona sin hogar, hablamos de los mitos, de las rentas subsidiadas, etc. Hay personas que no logramos convencer, pero hemos visto personas que han cambiado de opinión, que se dan cuenta que cualquiera de nosotros podemos ser un sinhogar”, compartió la directora del proyecto.
Hasta el momento llevan 2 meses buscando viviendas disponibles, y estarán con esta labor hasta junio de 2022, cuando terminan los fondos destinados. Sin embargo, esperan lograr nuevas subvenciones que permitan ampliar el proyecto y seguir impactando a las personas que no disponen de techo seguro.
En el oeste la coordinadora ofrece atención a personas de los siguientes municipios: Aguada, Aguadilla, Añasco, Cabo Rojo, Guánica, Hormigueros, Isabela, Lajas, Maricao, Mayagüez, Moca, Rincón, San Germán, San Sebastián y Yauco.
Si usted es dueño de una propiedad y quiere ser parte de este programa, puede comunicarse al 939-218-7240, o acceder a la página de Facebook de Coordinadora Morivií, donde se anuncian las fechas de la orientaciones para propietarios.
Igualmente, si conoce a alguien que se identifica como sinhogar, puede referirlo al programa para que lo orienten sobre cómo recibir los vales de renta subsidiada” 787-844-4961, 787-840-3116 y 787-626-6605.
