Cinco días es el plazo otorgado al secretario de Educación, Eliezer Ramos Parés para que le conteste al Senado de Puerto Rico varias interrogantes relacionadas con la Escuela Elemental Urbana de Guaynabo. Las respuestas son parte del Requerimiento de Información radicado por la presidenta de la Comisión de Educación senatorial, Ada García Montes, quien realizó una vista ocular en la institución académica.
“Alguien tiene que decirle al Senado quién es el responsable de lo que ocurre en este plantel escolar, que se construyó con fondos públicos y que la mitad se encuentra en pésimas condiciones. Además, hay cientos de cajas de lo que aparenta ser equipo nuevo, sin usar, en total abandono. Las condiciones del plantel incluyen además un refrigerador tipo Cooler por el cual, aparentemente, se pagó sin embargo, nunca funcionó. Hablamos de fondos públicos así que alguien tiene que rendir cuentas”.
En la vista ocular celebrada, se observó áreas abandonadas por décadas, falta de mantenimiento y ornato, entre otros. Además, según información provista por el personal escolar el teatro que en el pasado estuvo disponible para alquilar, sufrió daños con el paso de los huracanes Irma y María y a cinco años de los eventos atmosféricos, todavía se encuentra inoperante y en espera de las reparaciones. Otro señalamiento fueron unas consolas de aire acondicionado que están instaladas y tampoco pueden utilizarse.
Para el presidente del Senado, José Luis Dalmau, quien participó en la vista ocular, urge atender esta situación y concurre con la senadora García en que se tiene que establecer responsabilidades y consecuencias. Sobre este particular denunció: “Lo que observamos en esta escuela es inaceptable e indignante. Alguien tiene que asumir la responsabilidad y las consecuencias de por qué la escuela está en las condiciones en que se encuentra, cuánto es el dinero invertido en el material y equipo que encontramos. Tenemos que fijar responsabilidades ante el abandono de estos materiales que no llegaron a nuestros niños. Esto no puede ocurrir ni en las escuelas ni en ninguna agencia del gobierno”.
La Escuela Elemental Urbana fue construida en la década de los noventa con el propósito de acoger estudiantes desde Kinder hasta el cuarto año. Sin embargo, actualmente solo se utiliza la mitad del plantel el cual alberga los grados académicos de escuela elemental. Mientras, el resto del plantel se encuentra en lo que la senadora García Montes describió como “total abandono”. En la vista ocular participaron personal de la Oficina para el Mejoramiento de Escuelas Públicas, de la Autoridad de Edificios Públicos, del Departamento de Educación así como del Consejo Escolar.
“Tristemente, a pesar del grupo de representantes de diferentes agencias que participó en la vista, cuando indagamos sobre lo ocurrido en la escuela, nadie tiene respuesta, lo que evidencia la falta de comunicación entre el propio gobierno. Como maestra, me entristece saber que mientras en los salones de clases se adolece de materiales y de equipo, haya lugares como el que visitamos hoy con materiales abandonados”, afirmó García. “Los fondos federales y locales que recibe el Departamento de Educación tienen que cumplir con su función que es llegar a los salones de clases para suplir las necesidades de la comunidad escolar”. La senadora García Montes se comprometió en ofrecer seguimiento a este asunto hasta ver acciones en beneficio de la escuela y de la comunidad escolar.
