Héctor J. Jiménez González, director de la Oficina de Climatología del Recinto Universitario de Mayagüez.
La ola de calor es una situación atmosférica que produce unas temperaturas extremadamente altas en relación con la media de la época y que duran más de un día. Este escenario surge por la invasión de masas de aire muy cálido o bien por la permanencia prolongada de una de estas masas en una determinada zona.
De acuerdo con Héctor J. Jiménez González, director de la Oficina de Climatología del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) el termino de ola de calor se utiliza cuando hay tres días corridos donde la temperatura está por lo menos 5 grados Fahrenheit por encima del promedio normal para esa época.
“La temperatura que mide el termómetro y la sensación de calor que es lo que las personas sienten son dos aspectos diferentes, pero están relacionadas, ya que la sensación de calor es diferente si se está en la sombra o bajo el Sol. También, si la persona tiene manga larga y mahones, la sensación de calor va a ser mayor”, explicó Jiménez González.
El director de la Oficina de Climatología del RUM detalló que el efecto más grande dentro de la sensación de calor es la humedad, ya que mientras mayor humedad exista en el ambiente, peor es la sensación de calor.
“El cuerpo de las personas funciona sudando y evaporando el agua que sudamos, en ese proceso de evaporar esa agua el cuerpo se enfría, por lo que cuando el aire está bien húmedo a nuestro alrededor, es mucho más difícil que la persona evapore el agua, ya que el aire está saturado de agua, lo que dificulta que nuestro cuerpo se logre enfriar y crea un estrés de calor en el cuerpo”, mencionó Jiménez González.
El catedrático reconoció que si esta situación se va de las manos puede causar problemas de salud y hasta amenazar la vida de la persona, especialmente de la gente más vulnerable, como personas con condiciones médicas o que estén expuestos a trabajos bajo el Sol, entre otros.
“Cuando la sensación de calor es bien alta, el servicio de meteorología utiliza el termino índice de calor, donde combina la temperatura con la humedad, para dejarle saber a las personas cuán fuerte va a ser la sensación de calor ese día”, señaló Jiménez González.
En cuanto el Polvo del Sahara, el director de la Oficina de Climatología, manifestó que esto influye de manera indirecta. “En algunos sentidos puede ser bueno y en otros aspectos puede ser negativo, ya que si hay mucha concentración tiende a bloquear la radiación solar, por lo que en ese sentido mitiga, pero por otro lado el polvo tiende a interferir con la formación de la lluvia y sino llueve tenemos menor probabilidad de que baje la temperatura”, precisó.
Entre algunas recomendaciones, el catedrático del Departamento de Física del Recinto Universitario de Mayagüez sugirió que las personas estén pendientes y presten atención a los avisos emitidos por el Servicio Nacional de Meteorología. “Es importante vestir de manera apropiada, asegurar a las personas con su salud comprometida, hacer preparativos y pensar de qué manera vamos a mitigar esta situación”, concluyó.
