Obispo Auxiliar de San Juan
El pasado sábado 28 de mayo de 2022, a las 9:30 a.m. la Iglesia Catedral Nuestra Señora de la Candelaria de Mayagüez, se vistió de gala ante un templo lleno de sus feligreses para ser testigos de la Ordenación Diaconal de cuatro hermanos que han sentido el llamado del Espíritu Santo a seguir el camino de servir a Dios. Debido a compromisos en Roma, Italia, del Obispo Diócesis de Mayagüez, Monseñor Ángel Luis Ríos Matos, la imposición de manos en la consagración estuvo a cargo del Obispo Auxiliar de San Juan, Monseñor Alberto Arturo Figueroa Morales, con la asistencia de un gran número de sacerdotes y diáconos de la Diócesis. Los nuevos Diáconos son: Gaspar Echevarría García, Tadeo Jiménez Avilés, Pedro Rodriguez Bass y Francisco José Thillet Lugo. Nota relevante es que son los primeros Diáconos que Ordena el Obispo Alberto Arturo Figueroa.
La primera lectura, de ese día, del libro de Jeremías 1:5 refiere: Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones …. Como vemos, Dios preparó a Jeremías desde antes de su nacimiento con el fin de hacerlo profeta y este, con fidelidad respondió al llamado para realizar el trabajo al cual fue destinado. De ese mismo modo, los cuatro Diáconos fueron moldeado desde antes de ser concebidos y ellos, al igual que el profeta, respondieron con obediencia y convicción al llamado de nuestro creador para servir a la humanidad y específicamente a su Diócesis. Por lo tanto, los nuevos ordenados, por la imposición de mano del Obispo Alberto Arturo, tienen como misión el servicio en la liturgia, anunciar la palabra de Dios y estar desbordante de caridad. Porque los que ejerzan bien el diaconado, ganan para sí un grado honroso, y mucha confianza en la fe que es Cristo Jesús (1 Timoteo 3:13).
El Obispo inició su Homilía centrada en la segunda lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles (6: 1-7b), y citando la conclusión que indica: La palabra de Dios se difundía, y el número de los discípulos crecía considerablemente. En ello, podemos decir que brindó una predicación magistral a través del recuento como nace el servicio diaconal desde tiempos bíblicos, la importancia del apoyo de las esposas y familia, y sobre todo exhortando a los nuevos Diáconos a cultivar en primeras instancias la fe y compromiso diaconal desde el núcleo familiar. Además, les recordó que el servicio diaconal es un vinculo con los pobres, desheredados, excluidos; y por ello deben ser hacedores de la palabra de Dios y tratarlos con sensibilidad social y caridad; y cuando se acerquen a servir en la mesa del altar con el presbítero, piensen que es la mesa de Cristo.
En el rito de ordenación, los llamados al diaconado fueron presentados por el vicario general, se realizó el correspondiente examen de preguntas, procedieron de inmediato arrodillarse ante el Obispo y este procedió a unir las manos da cada uno mientras se comprometían a servirle a él y a la Iglesia. Luego les impuso las manos sobre la cabeza invocando al Espíritu Santo, y por último, cada ordenado recibió el Libro de los Evangelios simbolizando su ministerio de predica y enseñanza. Por lo que desde ese instante podrán asistir en el altar durante las misas, administrar el sacramento del bautismo y oficiar bodas. Servirán en sus correspondientes parroquias, al igual que en áreas de la pastoral incluyendo ministerios carcelarios de ser requeridos. Cabe destacar que el diaconado es instituido desde tiempos bíblicos; sobre ello en la biblia podemos mencionar versículos relevantes, entre otros: Hechos 6:1-6; Filipenses 1:1; 1 Timoteo 3:8-13.
En las palabras de cierre, el Obispo agradeció y reconoció muy en especial a las esposas y familias, a los pastores de los nuevos Diáconos por su apoyo, así como a todos los que han orado por ellos y los que fueron responsables a lo largo de esos años de su formación.
La Diócesis de Mayagüez es bendecida por la ordenación diaconal, y toda la Iglesia se llena de jubilo (Obispo Alberto Arturo Figueroa, 5/28/2022).
Por: Edgardo Rodríguez-Nieves, Ph. D
