Por: Messier Z. Torres Feliciano
Comienza el conteo regresivo y las escuelas en Puerto Rico, en especial en la zona norte, comenzarán a recibir estudiantes este 17 de agosto, de los cuales mucho han tenido que vivir experiencias que otras generaciones no han tenido que ver. Y es que luego de huracanes, terremotos, pandemias y una crisis económica en el país, estos estudiantes vuelven a las aulas a aprender con muchos retos de por medio.
Los terremotos amenazann la zona sur de Puerto Rico y los sismos se sienten casi por toda la isla, mientras que grietas aparecían en muchas escuelas como en las zonas de Utuado y San Sebastián y otros pueblos como Lares. Nuestras escuelas habían sido creadas bajo viejos códigos de construcción y estaban construidas utilizando las columnas cortas.
En este caso, esto es un alivio ahora, pues según explica Mercedes Martinez presidenta de la Federación de Maestros de Puerto Rico
“Si quedan cien son muchas, quedan pocas escuelas para reparar la situación de las columnas cortas” expresó Martinez.
Pero a pesar de las columnas cortas, estas son un alfiler en un pajar de problemas de construcción en nuestras escuelas, según nos explicaba Martínez, pues las columnas cortas abren puertas para ver que nuestras escuelas no están hechas acorde con los códigos de construcción actuales, por lo cual se propone que se lleven las escuelas a estos códigos, situación para la cual el Departamento de Educación actualmente no tiene en agenda.
Otro de los temas que preocupan ante la llegada del nuevo semestre escolar es el rezago en los estudiantes, por lo cual actualmente se están creando medidas para trabajar con este tema. Los estudiantes han vivido momentos históricos como terremotos, huracanes, pandemia entre otras cosas que afectan el tiempo lectivo y el proceso de enseñanza y aprendizaje algo que no solo sucede en Puerto Rico sino que está sucediendo a nivel mundial por cuestiones de la pandemia, pero en el caso de Puerto Rico, este tema va mucho más allá pues los terremotos, huracanes y la crisis económica que atraviesa el país también han jugado un papel en este asunto.
“El Departamento de su parte ha trabajado con lo de la escuela extendida posterior a las tres de la tarde, continúan ahora con ese programa, pero la atención debe ser holística no solamente en la cuestión académica. Nuestros estudiantes están muy necesitados de muchos servicios, muchos de ellos psicológicos.” Expresó la presidenta de la Federación de Maestros de Puerto Rico Mercedes Martinez.
Por otra parte, Martínez nos explica que los maestros no tienen muchas ayudas en la cuestión psicológica, pues lo único que existe es la Oficina de Asistencia al Empleado (PAE), que según Martinez cuenta con solo dos trabajadores sociales para un aproximado de doce mil docentes.
“Inclusive los psicólogos escolares que nombraron no atienden al personal docente y tampoco atienden a todos los estudiantes, atienden particularmente a estudiantes que sean del programa de Educación Especial, pero al estudiante regular tampoco lo atienden, así que esa situación tiene que cambiar, porque el servicio psicológico que también necesitan los docentes no se lo provee adecuadamente el Departamento de Educación.”
Sobre la falta de maestros en las aulas, el Departamento de Educación aproxima que faltan unas cien plazas por ser llenadas a lo que la Federación de Maestros espera por un informe a inicios de clases para corroborar con exactitud la cantidad de empleados que hacen falta en las escuelas públicas del país.
Para Martinez, el nuevo semestre escolar se enfrentará a los mismos retos que el Departamento lleva arrastrando durante décadas, quizá algunos más que otros. Entre las cosas a mejorar están la contratación de personal y las condiciones de trabajo, y estudio. Enfatizó en la hidratación del estudiante y las olas de calor que el país ha vivido en los últimos días lo cual también afecta el aprendizaje.
Por otro lado, en cuestiones de matrícula el Departamento ha visto una merma en su estudiantado debido a la emigración de personas y a la baja natalidad lo cual, según Martinez, el Departamento no ha aprovechado para disminuir la cantidad de estudiantes por salón para así dar una educación más individualizada y trabajar de una mejor manera el rezago academico.
Por otra parte, este medio intentó contactarse con la Región Educativa de Arecibo para este reportaje, los cuales no estuvieron disponibles para contestar nuestras preguntas.
