La época de Navidad es para estar en familia, visitar seres queridos y pasarla bien. Sin embargo, también pueden ser días muy difíciles para quienes han experimentado la pérdida de un ser querido. Adaptarse a esta realidad implica hacer un esfuerzo por entender que el duelo es un proceso natural que, si bien es universal, la manera de afrontarlo es individual. Por eso, algunas personas pueden experimentar sentimientos de tristeza más intensamente durante la época navideña.
Afortunadamente, existen estrategias para reconocer y manejar las emociones que pueden aflorar durante las festividades:
•Permítete sentir – Acepta que sentir dolor es natural. Date permiso para sentirte triste y llorar cuando quieras. También permítete sentir alegría y felicidad. Expresa todas tus emociones; no hay sentimientos buenos o malos. La paz surge cuando aceptamos nuestros sentimientos.
•Crea una rutina – Seguir una rutina puede ayudarte a mantener un sentido de orden y un propósito en tu vida.
•Céntrate en lo bueno – Permite que tus días se iluminen con las gratas memorias de tu ser querido. Reconoce, valora y aprovecha su legado para hacerle bien al prójimo y a ti mismo. ¡Celebra su vida! Sentirnos mejor y celebrar la vida no es olvidar, es vivir sin la presencia física del ser amado y honrar su memoria.
•Se realista – El proceso del duelo es diferente para cada persona. Tómalo con calma; en algún punto del proceso te sentirás más fortalecido. Decide si este año quieres participar de las festividades y reuniones familiares o hacer otra cosa, pero no te aísles completamente.
•Considera buscar ayuda – Las cargas pesadas se tornan livianas rodeándote de personas que te aman y apoyan. Busca ayuda profesional si te sientes abrumado.
•Toma un respiro – Practica la espiritualidad en un lugar donde encuentres belleza o sensación de paz. Conecta con la religión, la naturaleza, la música, el arte o cualquier otra actividad que te provoque emociones positivas.
•Cuídate – Realiza actividad física diariamente para que te mantengas fuerte y saludable, y ve a tus citas médicas. Procura sacar tiempo para reflexionar, rezar o meditar.
•Procura dar – Cuando damos, promovemos nuestra felicidad y la de los demás. Por ejemplo: en Navidad, llévale un obsequio a un necesitado en honor a la bondad de tu ser querido.
Trata de enfocarte en lo bueno y date la oportunidad de disfrutar las festividades. Si aun así sientes tristeza o síntomas de depresión, consulta con un profesional de la salud mental. Para mayor información, comuníquese al 1.866.627.8183
